El Parque Nacional Médanos de Coro está ubicado en el estado Falcón, en la jurisdicción de los municipios Miranda, Colina y Falcón, en el noroeste de Venezuela. Su área más importante está circunscrita alrededor del istmo, en la vía a la Península de Paraguaná al costado norte de la ciudad de Santa Ana de Coro. El istmo comprende una faja de 30 km de largo por 5 km de ancho. Posee una altura media de 20 msnm. Sus acumulaciones arenosas se desplazan cambiantes debido a la acción de los vientos alisios que soplan de este a oeste. Los Médanos de Coro fueron declarados parque nacional el 6 de febrero de 1974 bajo decreto Nº 1.592, abarca una superficie de 91.280 hectáreas, de las cuales 42.160 son tierras continentales y 49.120 son superficie marina.
Las arenas suaves y secas de este Parque Nacional son consecuencia de la erosión eólica sobre las rocas que con el tiempo son partidas en pedazos muy pequeños convirtiéndolas en arenilla y ésta, al desplazarse por la continua acción del viento, se va acumulando en parvas, convirtiéndose poco a poco a dunas que continuamente cambian de forma ya que están en continuo movimiento. Por ello también los médanos han recibido el nombre de arenas nómadas.
También existen formaciones similares en otras partes del país: En la vía a Castilletes, en la isla de Zapara (estado Zulia), en el cabo San Román, en los alrededores de Puerto Cumarebo (estado Falcón), y en los llanos venezolanos, en los alrededores del Parque Nacional Cinaruco Capanaparo (estado Apure) y el Parque Nacional Aguaro Guariquito (estado Guárico).
En los médanos de Tocópero y Puerto Cumarebo, fuera de los límites del parque pueden observarse 'médanos fósiles', colinas de sustrato arenoso formadas por la compactación de los médanos y cubiertas por vegetación permanente. Éstas son de diferentes tamaños y muestran diferentes niveles de desarrollo de la vegetación, por lo que probablemente representen diferentes etapas de formación, previas a los actuales Médanos de Coro.
Como en toda zona árida o desierta, la vegetación es escasa, existiendo no más de 60 especies vegetales, principalmente tunas, cardones y cactus. También están presentes en el parque, leguminosas como el cují yaque y pequeños árboles como el dividive, el yabo y el olivo.
De la misma forma, la fauna silvestre es un tanto escasa, pudiéndose observar reptiles, lagartos, iguanas, murciélagos y el oso hormiguero, entre otros.
Hay poca abundancia de mamíferos: Zorro común (Cerdocyon thous), oso melero (Tamandua tetradactyla), conejo sabanero (Sylvilagus floridanus). Entre las aves destaca el cardenal coriano (Cardinalis phoenicea), el halcón primito, gavilanes, perdices, la dara, palomas, turpiales, pelícanos (Pelecanus occidentalis), garzas y playeros.
El clima del parque es uno de los más áridos de Venezuela, y la temperatura promedio es uniforme a lo largo del año, oscilando entre los 27 °C y los 30 °C, con temperaturas extremas de 47 °C en sombra y mínimos por debajo de los 16 °C.
Las precipitaciones son escasas, de 250 a 500 mm.